22 feb 2011

DON CARDO Y YO

DON CARDO Y YO

Acérquese Señora, Señor. Voy a aprovechar a contarle aquí, total nadie nos ve ni escucha uno de mis sueños que aseguro harè realidad antes de parar las pezuñas.
El otro día caminaba por esas extensiones sin tiempo y espacio determinado. De repente, cual relato de Lewis Carrol, un Cardo guardián de la estepa me chifló para que me arrime a dialogar.
Le confesé a Don Cardo que ya estaba entrando por un camino vecinal a "La mitad de la Carretera" y digno de un hombre con panza prominente y mañas de viejo choto le dije que, entre varios objetivos en la vida, uno de los que estoy completamente seguro cumpliré es el siguiente:
"Cada día amo y admiro mas y profundamente extasiado la mística estepa patagonica. Deseo y será realidad, llegar a viejo y tener un pedazo de tierra al lado de un rio que surque la fantástica Estepa Patagonica; e imitando a algunos viejos que admiro como el Nano Serrat o Gustavo Santaolalla, quiero tener en ese lugar tiempo para trabajar la tierra y crear un pequeño viñedo de producción local y una plantación de marihuana para consumo personal y de mis afectos. Quiero acompañar esos últimos dias con rico vino y saludable hierba que acompañe a ricas comidas realizadas con materia prima extraidas del trabajo de una huerta familiar. Obviamente, también, un proverbial horno de barro.
Quiero dedicar esos ultimos años a la literatura, la música, el arte en general y fundamentalmente, dejarles a mis hijos y nietos ese viñedo para que lo utilicen como pequeño núcleo de producción y sustento económico para que dialoguen con la Tierra y no se olviden nunca de Don Cardo"
Disculpeme Señor, Señora si le conté "peloterias y tontudeces" que no le interesan, pero desde ya tiene la puerta abierta para ir a visitarme a aquel futuro paraje.
¿Le gustaria conocerlo?

Calaverita

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